PROYECTO DE INVESTIGACIÓN II

4. La planificación de la investigación
La planificación de la investigación debe estar orientada al diseño del proyecto. En este apartado se indican cronológicamente los pasos a seguir.
a) Una vez elegido el tema conviene limitarlo a una sola pregunta: quién, qué, cuándo, cómo, por qué. Un Trabajo que pretenda responder a muchas preguntas de las anteriores citadas puede resultar excesivamente amplio y poco profundo5.
b) Realizar de un modo rápido una primera búsqueda de información, permitirá al alumno situar el tema en su realidad y elaborar un primer índice provisional. En esta búsqueda previa exploratoria es aconsejable comenzar con una información general (enciclopedias y diccionarios) y continuar con la más específica (libros, artículos de revistas, conversaciones con especialistas).
c) Determinar cuántas páginas tendrá el Trabajo. El número de páginas estará comprendido entre 30 y 50.
d) Definir el número de capítulos y la extensión de cada uno de ellos.
e) Hacer un calendario de trabajo. Un calendario que sea realista y que contemple los plazos. Es decir, se trata de hacer una planificación temporal del trabajo a realizar, distribuida en meses.
f) Definir el formato de página que se utilizará (fuente, alineación, sangría, espaciado, interlineado). Como se ha indicado más arriba, el alumno debe ceñirse en todo momento a las indicaciones del Colegio, si las hubiere, o del Certamen al que va a presentarse el Trabajo. Escribir el texto de manera definitiva desde el principio no sólo permite ver su aspecto final desde el primer momento, sino que además supone un ahorro de tiempo y evita sorpresas desagradables del último momento6.
g) Comenzar a escribir la introducción. Escribir la introducción ayuda mucho a aclararse, aunque se sepa que al finalizar el Trabajo probablemente será necesario reescribirla.
h) Revisión final, encuadernación y exposición oral del Trabajo. La revisión final es un paso decisivo para que el resultado del trabajo realizado sea de calidad. Conviene dedicarle un tiempo determinado. Por este motivo la revisión final debe contemplarse en el calendario de trabajo antes citado. La revisión final comporta varias tareas:
— Una lectura detenida del texto completo poniendo atención especial en la ortografía y sintaxis.
— Completar, o modificar, el índice, la introducción, las citas de las fuentes y la bibliografía.
— Comprobar que los títulos de los capítulos y sus correspondientes secciones coinciden con los que figuran en el índice.
— Realizar el repaginado definitivo y comprobar que coincide con el expuesto en el índice.
— Comprobar que el texto completo se ajusta al formato de página elegido.
— Revisar la impresión en papel.
Una vez realizada la revisión final, no antes, es el momento de llevar a cabo la encuadernación de la memoria escrita de la investigación realizada. La exposición oral se tratará en el apartado seis.
5. Transformar la investigación en información escrita
Es decir, plasmar por escrito el trabajo realizado en una memoria con una estructura y una presentación formal preestablecidas. Este documento, la memoria, debe proporcionar toda la información necesaria para una fácil comprensión de la investigación realizada. Para ello, en su redacción se utilizará un lenguaje que aunque riguroso y adecuado al tema en estudio, sea sencillo y comprensible a quienes no tengan conocimientos profundos sobre el tema desarrollado. Inicialmente se definirán todos los términos técnicos la primera vez que aparezcan. "El tono empleado —en el texto— no debe ser demasiado subjetivo, ni conviene utilizar la ironía ni las exclamaciones"7.
Escribir es una de las tareas más difíciles que el ser humano es capaz de realizar. "Para escribir bien, hay que escribir despacio"8. Escribir requiere paz y tiempo, por lo tanto no puede dejarse para el último momento. Una vez organizado el material correspondiente a cada uno de los capítulos y secciones respectivas —por ejemplo, en distintas carpetas—, es de gran ayuda elaborar un primer guión para redactar cada una de estas partes de la memoria. Escoger acertadamente las palabras, construir correctamente las oraciones y atinar con la puntuación adecuada, son tres elementos clave en el redactado del texto. Una vez superada la ardua página en blanco, se trata ya de imprimir frecuentemente y revisar muchas veces lo que se ha escrito, es decir, corregirlo9.
A continuación se citan algunos consejos prácticos que pueden ayudar al alumno a la hora de transformar la investigación en información escrita, convirtiéndose a su vez en su propio editor:
— Trabajar con documentos distintos del procesador de textos, es decir, uno para cada una de las partes de la memoria escrita.
— Construir frases cortas respetando el orden natural de la oración: sujeto, verbo, complementos10.
— Utilizar correctores ortográficos informáticos.
— Hacer una copia de seguridad para estar a salvo de los fallos informáticos.
— Escribir la referencia completa (autor, título, editorial, año y página) en el mismo momento en que se cita una fuente en el texto, utilizando el mismo formato que se va a utilizar en el Trabajo definitivo.
— No dejar la preparación de la bibliografía para el final, es decir, ir incorporando cada una de las obras en el mismo momento en que es consultada y citada.
6. La exposición oral
La exposición oral del proceso y de los resultados de la investigación realizada se lleva a cabo delante de un tribunal constituido generalmente por tres profesores. Su duración no debe superar los quince minutos. Es conveniente que de forma previa a la exposición oral el alumno prepare un esquema, o guión, con los puntos básicos y más relevantes de su trabajo, es decir, la elección del tema, el estado de la cuestión, la metodología seguida, las dificultades con que se ha encontrado y las conclusiones alcanzadas.
La exposición oral debe hacerse de manera sintética, ordenada y coherente, sin prisas, vocalizando las palabras y dando la entonación precisa al discurso, y mirando de vez en cuando a los miembros del tribunal. Vale la pena tener en cuenta la ayuda que supone, y la seguridad que proporciona, realizar anticipadamente un ensayo de la actuación que tendrá lugar delante del tribunal.